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12/07/2023 / Barcelona

Gustavo Faverón, escritor peruano: ‘Intento recobrar la ambición de que escribir una novela es crear un mundo’

Una inoportuna lesión en la rodilla le dejó fuera de la primera edición del Festival KM Amèrica el año pasado. Por ello, el escritor peruano Gustavo Faverón afirma celebrar con una “emoción particular”su presencia, este vez sí, en un evento “donde más oportunidades tengo de encontrar a autores latinoamericano y, curiosamente, fuera de América Latina”. Residente desde hace años en los Estados Unidos, donde dirige un programa de estudios latinoamericanos, este doctor en literaturas y autor de Vivir abajo, considerada una de las obras de referencia del siglo XXI, admite sentirse cómodo en esa transición literaria donde confluyen los grandes temas desarrollados por los escritores del boom y las materias más intimistas de los tiempos actuales.

Nacido en 1966, Gustavo Faverón pertenece a la generación intermedia entre los grandes autores del boom y los autores del siglo XXI que tratan de desmarcarse de sus antecesores con una narrativa más intimista, con nuevos enfoques. Por ello, es inevitable preguntarle sobre la influencia en su literatura del boom. “Cuando uno piensa en este movimiento lo hace en 4 o 5 nombres, todos hombres, que abrieron muchas puertas pero opacaron la obra de otros muchos. En general, el trabajo de los escritores y escritoras de los 60 y 70 es una sombra fuerte”, explica.

Ambición
“En mi caso, es también una inspiración interesante. Una de las cosas que se ha ido extraviando en el camino es la ambición descomunal de los novelistas de aquel tiempo. Es algo que estoy tratando de recobrar. No se trata de escribir la novela total pero sí tener la ambición de que escribir una novela no es solo contar una historia sino crear un mundo, con muchas historias y niveles de lectura”.

Asumido el precedente del boom, Faverón asegura sentirse cómodo en ese peldaño literario intermedio, que se nutre tanto de los grandes temas como de historias mucho más personales. “En mi caso hay una convergencia de las dos líneas, la de una literatura muy pública y política, que piensa en temas como la nación o la violencia política, y la de una literatura mucho más intimista, de historias familiares. Me siento cómodo en ambos lados y me resulta natural que confluyan en una misma ficción”, explica.

Su celebrada novela Vivir abajo es un claro ejemplo: “Mi primer impulso no fue escribir una novela política sino tratar de aclarar las relaciones entre padres e hijos. Pero apareció el personaje del padre, que además era estadounidense, y todo el universo de la obra creció súbitamente: Ya no eran solo las relaciones padre-hijo, sino además las relaciones políticas entre países latinoamericanos y entre Estados Unidos y el Cono Sur y la región de los Andes”, explica.

Hablar de uno mismo
Sobre la evolución de la literatura generada desde América Latina y el Caribe, Gustavo Faverón constata el crecimiento de la literatura del yo a través de géneros como la crónica o la autoficción en contraste con la literatura del otro y del colectivo, que ha sido el típico canon de la novela latinoamericana. “Hay una tendencia mayor a hablar de uno mismo, lo que no necesariamente empequeñece las fronteras pero sí abre un aspecto que antes no era tan común de encontrar”, señala.

Una tendencia que él mismo practica... a hurtadillas. “Me gana el pudor y prefiero disfrazarme de alguien más en mis libros. En Vivir abajo eso sucede con un personaje que en diversos momentos siente la necesidad de ponerse una máscara, de cubrir su rostro cuando se siente demasiado expuesto”.

Acabamos preguntando a Gustavo Faverón qué libro le hubiera gustado escribir e inevitablemente cita a los grandes referentes peruanos como Mario Vargas Llosa –“con su presencia activa, el boom ha durado más en el Perú que en en el resto de América Latina.”, puntualiza— y César Vallejo. “De los peruanos cambiaría mi vida por haber escrito La casa verde, Conversación en la catedral o La guerra del fin del mundo. O la poesía de César Vallejo”. Aunque, tras citar también a Moby Dick, una de las grandes novelas del siglo XIX, obra del estadounidense Herman Melville, el escritor peruano acaba desvelando, entre risas, que cree que ese libro sería El Quijote.

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